jueves, 23 de noviembre de 2017

Amar

No puedo encontrar aguas azules
en un mar de aguas azules.
Los caminos con fin se han escondido,
no hay árbol que enseñe su fruto.

Cuando el día es el mismo día,
un tiempo repite otro tiempo.
Se hace el silencio y nada se oye,
nace el ruido y nada se escucha.

Contemplo un rio, luego un lago,
el lago de nuevo rio…
La luz viene y se marcha,
más tarde vuelve, después se va.

Se han ido mis lágrimas
al desván de lo oscuro.
Huyen al destierro del tiempo,
a la sombra de sombras

Van calladas y vencidas,
agotadas o muertas.
Son empleo del guarda,
son la tumba de los sueños

Ahora regreso de todas las noches,
noches blancas de papel,
de luces improvisadas,
de horas sin alas…

Aquellas de sueños a gritos,
de caricias templadas,
mañanas y deseos,
futuros ya ganados.

Por cada cristal apagado,
se enciende una vela.
De un poema enterrado,
hoy  nace un verso.

La niebla no me cubre,
el aire ya me habla.
Mis estrellas escondidas,
ya cumplen deseos.

Quiero despertarte otra luz,
hablar a quién no ha oído.
Besar tu albo rostro,
ser amado y de nuevo amar.


No hay comentarios:

Publicar un comentario